Creencias sobre el amor, Luz Rodríguez
Existe
la falsa creencia de que mientras más se brinde amor, mientras más nos
demos a nosotros mismos en una relación...más recibiremos. Pero la
experiencia demuestra lo contrario, cada día hay más personas con las
manos vacías y el corazón destrozado al sentirse estafadas por haber
dado de más y aún así no han logrado mantener la relación de pareja.
En las relaciones de pareja es necesario mantener un equilibrio porque se parte de la idea de que son dos personas en igualdad de condiciones...ambos tienen la misma capacidad de dar y es necesario que ese dar se mantenga en equilibrio “el desorden” se produce cuando creo que tengo que dar de más o doy más de lo que el otro puede devolver.
¿Qué mensaje estoy enviando cuando doy de más?
Necesito dar para que me quieran: probablemente he tenido que luchar por la atención de mis padres ante mis hermanos
Si doy más el otro se sentirá en deuda y no me dejará: Puedo en un momento determinado hacer sentir culpable al otro porque no valore lo que le doy.
Mantengo el control de la relación: Ejerzo el mayor poder en la relación al sentirme más grande y con la responsabilidad de dar.
El otro no es capaz y por lo tanto le tengo que dar.
No soy capaz de recibir: cuando no he aprendido a tomar de mis padres...ya sea porque estaban ausente o por resentimientos con ellos, no he valorado lo que me han dado.
Ocupar mi Lugar ¿En qué lugar he llegado a la vida de mi pareja?
Si mi pareja tiene hijos o relaciones previas a mí, tengo que ser consciente que estoy llegando en último lugar. Cuando intento ocupar el lugar de las parejas anteriores o de los hijos, estoy buscando usurpar un lugar que no me corresponde. Y se produce un desorden en el amor. El otro al igual que yo tiene su historia pasada y como tal se debe respetar. Y sus hijos me guste o no, tienen prioridad. Es algo muy doloroso de llevar sobre todo si nos hemos sentidos desplazados en nuestra propia familia. Mientras más rápido se acepte ocupar el lugar que nos corresponde en la vida de nuestra pareja, mejor fluirá el amor y el respeto y será más fuerte para sostenerse a través del tiempo. Otra manera manera en que podemos pasar por alto el principio de ocupar mi lugar, es yo mismo estar ocupando un lugar que no me pertenece dentro de mi sistema familiar, por ejemplo ser el confidente de uno de los padres en contra del otro, porque empiezo a ser una especie de “amante” de uno de mis padres y ya estoy ocupado y no puedo estar presente emocionalmente para mi propia relación de pareja.
También puede darse el caso de haber quedado abierta antiguas relaciones, en donde aún continúo unida emocionalmente a una ex pareja, suspiro por él o por ella y espero que algún día se puedan solucionar las cosas entre ambos. O bien puedo tener tanto resentimiento con esa persona que el vínculo con él o ella aún se mantiene intacto a través del rencor, quedando abierto un duelo que en la medida que pase más el tiempo, más difícil será de cerrar. El mantener una relación de pareja saludable requiere consciencia de los principios sistémicos y aplicarlos en la mayor medida posible, respetando los órdenes del amor...en donde hay un cause el amor puede fluir libremente
Escrito por Luz Rodríguez
En las relaciones de pareja es necesario mantener un equilibrio porque se parte de la idea de que son dos personas en igualdad de condiciones...ambos tienen la misma capacidad de dar y es necesario que ese dar se mantenga en equilibrio “el desorden” se produce cuando creo que tengo que dar de más o doy más de lo que el otro puede devolver.
¿Qué mensaje estoy enviando cuando doy de más?
Necesito dar para que me quieran: probablemente he tenido que luchar por la atención de mis padres ante mis hermanos
Si doy más el otro se sentirá en deuda y no me dejará: Puedo en un momento determinado hacer sentir culpable al otro porque no valore lo que le doy.
Mantengo el control de la relación: Ejerzo el mayor poder en la relación al sentirme más grande y con la responsabilidad de dar.
El otro no es capaz y por lo tanto le tengo que dar.
No soy capaz de recibir: cuando no he aprendido a tomar de mis padres...ya sea porque estaban ausente o por resentimientos con ellos, no he valorado lo que me han dado.
Ocupar mi Lugar ¿En qué lugar he llegado a la vida de mi pareja?
Si mi pareja tiene hijos o relaciones previas a mí, tengo que ser consciente que estoy llegando en último lugar. Cuando intento ocupar el lugar de las parejas anteriores o de los hijos, estoy buscando usurpar un lugar que no me corresponde. Y se produce un desorden en el amor. El otro al igual que yo tiene su historia pasada y como tal se debe respetar. Y sus hijos me guste o no, tienen prioridad. Es algo muy doloroso de llevar sobre todo si nos hemos sentidos desplazados en nuestra propia familia. Mientras más rápido se acepte ocupar el lugar que nos corresponde en la vida de nuestra pareja, mejor fluirá el amor y el respeto y será más fuerte para sostenerse a través del tiempo. Otra manera manera en que podemos pasar por alto el principio de ocupar mi lugar, es yo mismo estar ocupando un lugar que no me pertenece dentro de mi sistema familiar, por ejemplo ser el confidente de uno de los padres en contra del otro, porque empiezo a ser una especie de “amante” de uno de mis padres y ya estoy ocupado y no puedo estar presente emocionalmente para mi propia relación de pareja.
También puede darse el caso de haber quedado abierta antiguas relaciones, en donde aún continúo unida emocionalmente a una ex pareja, suspiro por él o por ella y espero que algún día se puedan solucionar las cosas entre ambos. O bien puedo tener tanto resentimiento con esa persona que el vínculo con él o ella aún se mantiene intacto a través del rencor, quedando abierto un duelo que en la medida que pase más el tiempo, más difícil será de cerrar. El mantener una relación de pareja saludable requiere consciencia de los principios sistémicos y aplicarlos en la mayor medida posible, respetando los órdenes del amor...en donde hay un cause el amor puede fluir libremente
Escrito por Luz Rodríguez
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