Hacia la Quinta Dimensión: el arte de Bendecir






Bendecir...Encontré una información que hablaba de "Bendecir" y hacer de ello un "Arte", como camino para alinearnos con las nuevas frecuencias del corazón más elevado, que nos facilite vibrar en alto, y correlativamente vayamos resonando con una forma paralela de estar y vivir la vida.

Se trata de una práctica sencilla, pero con un alto potencial para transformar tu vida y brindarte una mayor apertura y acceso a las energías que ahora están disponibles en el plano terrestre.

Dominar el arte simple de la bendición puede concederte un acceso mayor a la quinta dimensión, dónde podemos empezar a experimentar la plenitud de nuestro Ser desde planos más elevados de consciencia, manifestando una salud radiante, la abundancia sin límites, amor incondicional, energía creativa ilimitada y la posibilidad de realización de todas tus visiones y el más alto bien.

En el corazón del arte de bendecir, está la  aceptación de todo lo que ves, todo lo que imaginamos y todo lo que nos encontramos. Siempre existirán esas situaciones que parecen difíciles, injustas, carentes de amor, incluso trágicas... Siempre habrá razones perfectamente justificadas para centrarse en todo lo que no funciona, aquello que nos va mal, en base a lo que pensamos que no debería ser... Sin embargo, la opción de focalizarnos en estas situaciones nos unen a vibraciones de baja frecuencia, que no favorecen la reconexión con las altas frecuencias que mueve el Amor, propiciadas ahora por las frecuencias recibidas por las mayores descargas de energía solar que en estos tiempos sobre nuestro planeta.


El camino de “bendecir” es el camino del corazón, una opción que nos permite conectar con la perfección divina del universo.  Está implícito en la aceptación, hacerlo sin prejuicios, dándole prioridad a la actitud de ver las bendiciones en todo lo que te acontece en este momento, todo lo que te ocurre y tienes delante de ti, por malo, injusto, o carente de sentido, que hoy te parezca. Bendice incluso, aquellas situaciones que no merecen más que indignación y reproche, bendice, acepta, perdona, AMA...Incluso en aquellas situaciones, no elegidas, no queridas, no merecidas…podríamos decir que existe la bendición de traer a nosotros el mayor potencial de transformación.


Muchas personas están todavía ligadas a su pasado por la energía que poseen en relación a situaciones anteriores, estas energías pertenecen ya a lo “viejo”… Al viejo mundo, a un ciclo largo de 25.000 años que acaba de terminar, según el calendario Maya. Estamos viviendo un tiempo mágico de fin de ciclo e inicio de uno nuevo, maravilloso, oportuno para crear y dar paso a nuevas energías, que estando favorecidas por la entrada de nueva energía cósmica, que nos llega con más intensidad debido a la alineación planetaria en estos tiempos. El tránsito en el que nos encontramos, es exactamente aquel entre el ciclo largo de tiempo y uno nuevo que vendrá, mientras vivimos un ciclo corto de transición dónde podemos dar pasos a ese nuevo ciclo largo de tiempo de otros 20.000 años,que podría estar determinado por las energías que en este tiempo de transición seamos capaces de crear, canalizar e irradiar. El paso a la también llamada Nueva Era de Acuario, supone el cambio de polaridad en cuanto a la dominación de energías polarizadas masculina-femenina, ying-yang, Dios-Diosa, siendo ahora el tiempo de predominio de la energía femenina y búsqueda de equilibrio con respecto al viejo ciclo largo dónde ha imperado la energía masculina.

Para facilitar el paso de una energía más densa (de baja frecuencia), basada en el miedo, a una energía más fluida y sutil (de altas frecuencias), basada en el Amor, podemos empezar a utilizar técnicas y herramientas que nos faciliten nuestra comprensión y entendimiento ante los sucesos que estamos viviendo. Las personas que aún se aferran a la energía densa, a lo viejo…que aún no han podido “soltar”, pueden empezar a atraer nuevas frecuencias a través de una nueva visión, un nuevo enfoque a la hora de juzgar las situaciones. Se trata de escoger una opción nueva, “bendecir” todo aquello que nos acontece.

Esto se puede conseguir en cualquier momento, mirando a una antigua situación con nuevos ojos. Esto se puede hacer, incluso si tienes que emplear una potente lupa para ver las bendiciones que resultan casi imposibles de vislumbrar en el camino.

Sin embargo, si miramos con Amor, y dejamos a un lado el miedo y los apegos a las cosas más superficiales, podremos percibir y darnos cuenta de que las bendiciones están siempre presentes en cada situación.

Mantener una actitud positiva frente a la peor situación imaginable requiere maestría en el Arte de Bendecir.

Las energías negativas para responder a cualquier situación, son como los virus. Estas energías y los pensamientos negativos asociados a ellas sólo sirven para  alimentar a esa energía de baja densidad y frecuencia, y engrosar más energía  en tu "cuenta bancaria negativa". Este mecanismo asegura que tu futuro será impregnado con toda seguridad de más energía negativa de la que cada vez nos será más difícil librarnos.

Los sentimientos negativos se vuelven contra nosotros mismos, nos impiden ver nuestra parte del ser en calma, amante de sí mismo, que ve el mundo a la luz de la perfección divina. La división de la que hablamos, se produce internamente. Estas energías se dividen siempre dentro de ti, y de este modo será difícil, si no imposible, permanecer en un lugar tranquilo y claro dentro de ti mismo, dónde has de encontrar la visión y la actitud para percibir aquello que aún es digno de bendecir en tu vida.

Decíamos que las energías de menor frecuencia, negativas y asociadas a la emoción del “miedo”, son como los virus que están en todas partes alrededor de ti, flotando a través de las ondas en busca de un huésped. Aquellas personas, que están vibrando en la misma frecuencia con la que estas energías se alinean, son susceptibles de verse afectadas más a menudo por ellas, las atraen.

Esta sensibilidad puede dar lugar a que el virus se alimente de tus energías y tu fuerza vital se vea disminuida.  Esto impediría a su vez, estar en resonancia con las vibraciones más altas, en las líneas de tiempo.


Aquellos que están instalados en las frecuencias negativas sin querer convertirse en vampiros de energía, están “agotando” a todos los que entran en contacto con ellos. Estas experiencias son aprendizajes a través de los que  muchas almas están pasando.

Una forma de contrarestar estas energías de baja vibración es entrar en el campo energético de la persona para romper esta inercia y contratacar el “virus” que está “agotando” a aquellos que están teniendo esta experiencia o cualquier otra experiencia que acumule negatividad y haya entrado en un bucle virulento de atracción de dicha energía.

Bendecir, bendecirlos a todos. Sin juzgar, ni criticar, sin respuestas negativas, hacer de parapeto e irradiar desde un campo de energía opuesto, frecuencias altas, desde el Amor Incondicional, para poder magnetizar o equilibrar los campos de aquello que está descompensado y nos arrastra al agotamiento y las frecuencias de baja vibración, con la repercusión a nivel emocional, mental, y físico correspondiente.

En Amor Incondicional, bendiciendo a todos y todo, nos convertimos en inmunes a las energías de baja vibración.


El poder de la quietud y la paz interior

La quietud de la mente y la paz interior son el núcleo de poder que existe en un estado positivo y de alta vibración. Cuando la mente es clara, somos capaces de ver las bendiciones en cada situación y llegar a ser transparentes para los "negativos", de menor dimensión, y facilitar que esas energías puedan desaparecer.

Al optar por alinearnos con un punto de vista más alto y mejor, podemos ver las bendiciones en todas nuestras experiencias. Bendiciendo a todos y todo lo que viene, nos permite irnos quitando a “plazos” los tentáculos de la energía de baja vibración.


Alineación  vibraciones altas con el Amor Incondicional

El amor incondicional es la vibración más alta en el universo. Cuando logramos vivir en la frecuencia del amor, podemos acceder a líneas de tiempo y energías en línea con nuestras visiones más elevadas.

A partir de este estado, todo es posible, todo es sanado, y todo se entiende. Cada vez que te sientes fuera de balance, puedes “volver a casa” a bendecir a través de ese Amor y automáticamente se activarán esas líneas de tiempo, de la felicidad eterna y la posibilidad ilimitada.

El futuro ya está aquí, soltar y bendecir, esa es la puerta de entrada a la nueva conciencia que llamamos de quinta dimensión…

En cualquier caso, bendecir y amar, es la puerta de entrada a una nueva conciencia que te permite CREAR sobre un ilimitado mar de posibilidades fundamentadas en el Amor Incondicional cuya frecuencia nos abre las puertas a líneas de tiempo nuevas que vienen acompañadas de una visión enfocada en nuestro ser espiritual, cuya alma custodia nuestro más alto grado de elevación para cumplir con la misión de Ser lo que vinimos a Ser y experimentar en base a la conexión con la divinidad que ya somos, y el Todo y las Partes a las que pertenecemos.

El amor es la fuente inagotable de conocimiento, por la que accederás al reino de los cielos cuando seas capaz de bendecir todo lo que te llegue a tu vida. Bendecir es una actitud, y la magia de empezar a abrir tu corazón y fluir con la vida, que si hoy es una, mañana puede estar llena de posibilidades.




El amor es energía, y eso Somos. Busca en ti esa parte que te pertenece y que te traerá las claves para seguir avanzando en la aventura y el regalo que es Vivir…cuando comienzas a comprender aquello que siempre fuimos.




Por DL ​​Zeta, 28 de enero 2011
Versionado y traducido al español por Odin.

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