Fanny Libertun: Sanar no es arreglar o corregir
Desterrar la imperfección es destruir la expresión, oponerse al esfuerzo, paralizar la vitalidad.
-John Ruskin
Cualquiera que sea el método de sanación que adoptemos, nuestra tendencia más común es la de poner las distintas prácticas al servicio de nuestras fantasías curativas. Una fantasía curativa es un mito personal que usamos para explicar lo que creemos que está mal con nosotros y nuestras vidas y lo que imaginamos que hará que todo sea mejor (de una vez y para siempre).
Así no estamos poniendo tanto el acento en estar presentes en todo lo que nos sucede y en reconocerlo para poder comprendernos, sino en tratar de ser mejores. Vivimos reforzando la fantasía de que somos deficientes o insuficientes con respecto a un parámetro que –tristemente- ni siquiera existe en la realidad. Cualquier práctica de sanación se convierte de esta forma en un medio para auto mejorarnos pero también para enderezarnos.
Cuando nos definimos como “fallados” y por eso creemos que tenemos que arreglarnos o corregirnos, sentimos culpa, vergüenza, ansiedad, enojo y nada de amor y perdón hacia nosotros mismos. Independientemente de nuestras intenciones de sanar para vivir mejor y para hacer de la vida un lugar mejor, somos bellos y perfectos tal cual somos. No hay ningún lugar al que llegar, ni nadie que sea completo o perfecto. Poner el esfuerzo en convertirnos en productos terminados será sólo una pérdida de energía y tiempo.
Fanny Libertun
http://
http://www.facebook.com/
Comentarios